miércoles, 15 de diciembre de 2010

HABITAPPLE


 

Creo que  he  encontrado el nombre que buscaba desde hace tiempo para el proyecto de viviendas  sostenibles, comunitarias y autosuficientes que tengo en la cabeza. La marca es HABITAPPLE. Casi perfecto. Un juego de palabras que sugiere conceptos que  facilitan la aproximación al sentido del proyecto: hábitat (lugar donde se vive) + manzana (bloque de casas, unidad de arquitectura comunitaria) + “habitable” (como concepto de calidad ambiental y social, implícito en el  vocablo) + “apple” (como referencia de tecnología avanzada).
Como dice la Wikipedia, “en ecología, hábitat es el ambiente que ocupa una población biológica, el espacio que reúne las condiciones adecuadas para que la especie pueda residir y reproducirse, perpetuando su presencia”.

Algunos apuntes  sobre el proyecto ya estaban incluidos en la presentación del  proyecto “Casas Productivas”, que elaboré en el marco del  programa RuraLab del grupo País Románico y que presenté personalmente en el Curso de Construcción Sostenible y Desarrollo Rural  que organizamos en Septiembre de 2010, en Aguilar de Campoo. 
Si  el grupo País Románico decide continuar el proyecto, me gustaría sumar fuerzas y conocimiento, para intentar llevar a cabo no sólo el diseño, sino también la ejecución de un modelo de vivienda de futuro que responda a las necesidades estratégicas de revitalización demográfica, social y productiva de los territorios rurales. Se trata de apuntar hacia el objetivo de un nuevo y sustentable urbanismo, adaptado  a los nuevos contextos sociales, culturales, tecnológicos y económicos de la  emergente sociedad del conocimiento y, por tanto,  a las nuevas circunstancias y necesidades  de las  comunidades locales, tanto del medio rural como del urbano.

Considero que se trata de un proyecto de especial  relevancia estratégica para los territorios rurales, necesitados de captar nueva población  joven y emprendedora, y en especial para la comarca de la Montaña Palentina, que con este proyecto podría  renovar y  potenciar el  sector de la construcción, además de posicionarse como territorio innovador.

En todo caso, mi determinación es clara y  voy a seguir trabajando en este proyecto, tanto en solitario como en compañía, intentando recabar el interés de quienes  tengan interés por el mismo. Mi intención es que sea un proyecto abierto y colaborativo, para lo que sería necesario contar  para su diseño con los siguientes participantes:

-Un grupo de potenciales usuarios del tipo de viviendas proyectadas, dispuestos a participar activamente en el diseño.
-Un estudio de arquitectura  con creatividad, solvencia y atrevimiento suficiente para afrontar el proyecto arquitectónico.
-Un ayuntamiento del territorio que sepa ver la oportunidad  política, económica y social que supone promover un proyecto de estas características.
-Una empresa constructora, del territorio a ser posible, emprendedora y con suficiente conocimiento y  recursos.

Por otra parte, mi propuesta de partida, orientada a la consecución de los objetivos  señalados anteriormente, se fundamenta  en los siguientes puntos:

1-La unidad constructiva  no será una vivienda, sino un bloque de viviendas –o manzana- con tamaño crítico suficiente para la eficiencia tecnológica, energética y económica  del conjunto edificado.

2-Deberá ser necesariamente integrable en la red urbana  ya existente.
3-El suelo y la edificación deberá ser de propiedad pública-municipal.
4-El regimen de las viviendas será el de VPO (Viviendas de Protección Oficial), en alquiler.
5-La financiación será mixta:  inversión pública + tasa de uso aportada por los vecinos/residentes.
6-La edificación debe seguir pautas de construcción bioclimática.
7-Deberá proponerse la autosuficiencia energética  para  los consumos propios de la vivienda, del transporte personal y de los espacios comunitarios, mediante sistemas de energías limpias y renovables.
8-Incorporará espacios productivos de horticultura familiar en invernaderos integrados.
9-Incluirá un espacio productivo por vivienda, para el  trabajo autónomo (oficina, taller, pequeño comercio).
10-Incorporará equipamiento de tecnologías avanzadas para la información y la comunicación (TIC), como  para la  gestión comunitaria y eficiente del sistema energético, así como para la gestión autónoma de los residuos producidos por la comunidad.
11-Dispondrá de espacio cívico para actividades sociales, culturales y de ayuda mutua, así como de espacio recreativo, de uso abierto al resto de la comunidad local.
12-El sistema constructivo será de base modular  con materiales ecológicos y reciclables.
13-El diseño de las viviendas responderá a una  diversidad tipológica acomodada a la estructura social y demográfica de la población local.
14-El diseño será abierto y flexible, en modo que permita la intervención – reversible- por parte de los  vecinos,  para la adaptación y personalización de las  viviendas, tanto en la distribución de los espacios interiores como en su apariencia  exterior.




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